España tiene el sector turístico más
competitivo del mundo
España
lidera por primera vez el ranking mundial
de competitividad turística que elabora el Foro
Económico Mundial. El turismo español
logra el podio internacional gracias a la riqueza de sus recursos culturales,
sus infraestructuras y "la adaptación a los hábitos de consumo
digitales", según señala el organismo, que analiza la industria vacacional
de 141 países de todo el mundo. España ha escalado a gran velocidad puestos en
esta clasificación mundial, ya que en la anterior edición de 2013 (el estudio
se realiza cada dos años), ocupaba la cuarta posición. Y en 2011, la octava.
El estudio sobre competitividad turística que elabora el
Foro Económico Mundial —organismo responsable de la organización de la reunión
anual de Davos— analiza 14 áreas vinculadas al mundo del turismo y extrae una
nota media para cada economía. España obtiene un 5,31 sobre 7, la mejor
calificación de entre los 141 países analizados. Tras España, los países que
mejores posiciones registran son, por este orden, Francia, Alemania, Estados
Unidos, Reino Unido, Suiza, Australia, Italia, Japón y Canadá.
De entre los
cuatro grandes bloques analizados en cada país para obtener la nota media, en
el que mejor calificación recibe España es en el área referente a
“infraestructuras”, donde suma 5,68 puntos, la segunda mejor calificación
mundial. Le sigue el bloque de “recursos culturales y naturales”, donde obtiene
un 5,64, la cuarta mejor nota del mundo, sobre todo gracias al patrimonio
cultural. En este punto concreto obtiene el primer puesto mundial, que valora
que los países tengan lugares declarados patrimonio de la humanidad, bienes
intangibles de interés, instalaciones deportivas, turismo de negocios o una
buena adaptación al entorno digital, por ejemplo, con respuesta a la demanda de
información online sobre turismo.
En el
apartado de “entorno favorable”, que hace referencia a aspectos como la facilidad
para hacer negocios o el mercado laboral, España pierde muchas posiciones:
obtiene un 5,31 sobre 7, lo que la coloca en el puesto 35 del mundo. Lastran
este bloque, principalmente, sus malos resultados sobre productividad vinculada
a los salarios en el turismo. Ocupa el puesto 125 de 141, en un apartado
liderado por Hong Kong. La falta de flexibilidad del mercado laboral también
sale mal parada, en el puesto 113.
Finalmente, en el apartado sobre “Políticas de viajes y turismo”, España
saca un 4,66, la nota más baja de sus clasificaciones por bloque, pero buena en
comparación con el resto de países, lo que permite colocarse en la octava
posición internacional. En realidad pierde puntos por un aspecto concreto: en
competitividad en precios aparece en el puesto 105 de 141. En este aspecto
destinos como Egipto, Indonesia, Malasia o Túnez son las más aventajadas.
Entre las
diez primeras posiciones mundiales de competitividad turística, seis están
ocupadas por países europeos. Todos los países líderes destacan por sus
infraestructuras, las condiciones de salud e higiene de sus establecimientos, y
el grado elevado de apertura internacional. "De los grandes países emergentes,
China (puesto 17) y Brasil (puesto 28) están entre las 30 primeras
posiciones", destaca el Foro.
La revolución digital del turismo
En concreto, en el informe de 2015, según destaca el Foro Económico
Mundial, "la posición de liderazgo de España llega gracias a la buena
clasificación mundial en riqueza cultural (primer puesto), su habilidad para
apoyar digitalmente las búsqueda de entretenimiento (cuarta posición) —una
medición que refleja cómo el país se ha adaptado a los hábitos de consumo
llegados con la revolución digital—, así como unas excelentes
infraestructuras".
El organismo
dedica este año especial interés a señalar la necesidad de que los países se
adapten a las nuevas tendencias del turismo. Advierte: "Muchos países aún
deben hacer más para enfrentarse a los retos pendientes del sector de viajes y
turismo, lo que incluye las políticas de visado, una mejor promoción del
patrimonio cultural, la protección del medio ambiente y el desarrollo de las
tecnologías de información y comunicación (TIC). Esto a su vez podría impulsar
el crecimiento económico y la creación de puestos de trabajo", señala en
un comunicado Roberto Crotti, economista del Foro Económico Mundial.
El informe
subraya la necesidad de que las economías se adapten "rápido" a
"los servicios y el márketing online,
mientras Internet en el móvil define cada vez más cómo los viajeros
seleccionan, planificación y evalúan sus viajes". Recuerda, además, el
potencial económico de las actividades turísticas: aportan ya casi una décima
parte del PIB mundial y creció a un promedio de 3,4% anual durante los últimos
cuatro años", frente al 2,3% de la economía mundial. "Indica la
capacidad de recuperación del sector a las crisis económicas. En los próximos
cinco años, el crecimiento del sector podría acelerarse al 5,2% por año, de
acuerdo con el Consejo Mundial de Viajes y Turismo", recuerda.
El sector turístico español creció un 3,7% en 2015
Los
resultados registrados por la actividad turística en 2015 confirman
que este sector es el que más crece en la economía española y el que más empleo genera.
El PIB turístico registró un avance del 3,7%,
alcanzando los niveles máximos registrados en los últimos 15 años, según el
balance del año realizado por Exceltur.
Al final del ejercicio, aportó medio punto al crecimiento del PIB español, hasta registrar 124.000 millones de euros.
"El año 2015 ha sido francamente bueno. Todos los destinos
y comunidades autónomas mejoraron sus resultados", ha afirmado hoy José Luis Zoreda, vicepresidente de dicha
agrupación, en la presentación del informe "Perspectivas
turísticas", que realiza un balance del ejercicio que
acaba de finalizar.
Uno de cada siete puestos de trabajo creados
en España en 2015 correspondieron al sector turístico,
lo que supuso 73.343 nuevas ocupaciones, un 5,5% más que el año anterior, hasta
aproximarse a los 1,4 millones de afiliados a la Seguridad Social.
Según destacó Zoreda, dos factores contribuyeron fundamentalmente al incremento de la actividad turística: la recuperación de la demanda nacional, que creció por encima del 5%, y al desvío de turistas extranjeros por la inestabilidad social y política de los principales competidores de nuestro país en el segmento de sol y playa.
Expuso
que de los 2,1 millones de viajeros que perdieron en conjunto Egipto, Túnez y Turquía, al menos un millón se decantó por España.
Otros
factores que también impulsaron el PIB turístico fueron la depreciación del euro, que
propició un contexto muy favorable para incrementar el número de turistas
procedentes del Reino Unido y
de Estados Unidos,
así como la recuperación de los viajes de
negocios.
En el lado negativo,
Zoreda señaló que se mantiene la caída del gasto medio por turista y que se suceden así 16 años en los
que se mantiene esta tendencia, por la llegada de visitantes con un perfil de
consumo más bajo.
A modo de ejemplo, el director de estudios de Exceltur, Óscar Perelli, indicó que en 2000 el gasto medio por viajero fue de 1.100 euros, mientras que
al cierre de 2015 fue de 741 euros. No obstante, esta agrupación estima
que al final del pasado ejercicio se registraron unos ingresos de 51.000
millones de euros, dato que tendrá que confirmar más adelante el Banco de España.
Expectativas turismo en España 2016
No podemos dejarnos impresionar únicamente por la relevancia
del sector turístico en la economía española, su resistencia y su enorme
potencial, ya que todavía existen algunos retos que resolver para no perder ese
liderazgo. Potenciar una oferta turística menos
estacional, fomentando otro tipo de turismo ligado a la esfera de negocios o a la
gastronomía, es una medida necesaria para que el turismo en España continúe
batiendo récords.
Nuestro país también se ha sumado al
carro de las experiencias como mayor atractivo turístico, y lo ha hecho con
maestría. Ningún país como España tiene una imagen tan reconocible a nivel
internacional, pero a la vez tan distorsionada de la realidad.
Las estrategias de marketing turístico
españolas se han centrado en anteriores décadas a la exaltación de tópicos como
los toros, el flamenco, el jamón, la siesta y, por supuesto el sol y playa. El
volumen de visitante que ostenta nuestro país es espectacular, superando los 48
millones en lo que va de 2015.
Pero España no se conforma con tener
ingentes recursos turísticos, sino que quiere potenciar su imagen de marca como
un lugar cosmopolita, variado, donde el arte y la cultura tienen un papel
preponderante y en el que uno de los mayores atractivos es su gente.
El empleo de frases negativas para
acabar con una sentencia firme, es una estrategia magistral en marketing. Es
por ello por lo que muchas de las fotografías y vídeos de promoción turística
de España, conjugan en recurridas ocasiones la frase “no necesito”.
Desmintiendo tópicos o más bien matizándolos, la campaña de marketing turístico
española crea en el espectador la necesidad de vivir las experiencias
presentadas.
Todas ellas acaban englobadas en la
frase “I need Spain” (yo necesito España). Tres palabras que transmiten a la
perfección el objetivo de todo destino turístico: crear una necesidad y, por
supuesto satisfacerla.
Fuente
https://diegoturimarketing.com/2015/10/18/las-5-mejores-campanas-de-marketing-turistico-del-mundo/
¿Cuáles crees que son las ventajas competitivas del sector turístico español? ¿Qué aspectos crees que debería mejorar?